La vida en Pekín

Pekín, la capital de la República Popular China, es el centro político, económico y cultural del país, y también actúa como centro de transporte e intercambios internacionales.

Beijing (Peking) es una metrópolis de rápido crecimiento, dinámica y moderna, con edificios de gran altura, centros comerciales y grandes hoteles internacionales conectados por un intrincado sistema de autopistas que atraviesa la ciudad. Sin embargo, los edificios modernos esconden hutongs tradicionales, parques y numerosos tesoros arquitectónicos, como exquisitos templos con azulejos amarillos.

Historia

Pekín, conocida por ser una ciudad antigua y cultural, fue el hogar del "Hombre de Pekín" hace unos 500.000 años. Pero como ciudad, la historia de Pekín se remonta al año 1045 a. C. Durante un período de casi 1000 años, Pekín fue la capital de China, o para ser más específicos, la capital provisional de Liao (907-1125) y la capital de las dinastías Jin (1115-1234), Yuan (1279-1368), Ming (1368-1644) y Qing (1644-1911).

Geografía

Pekín está situada en el extremo norte de la llanura del norte de China; la ciudad se encuentra aproximadamente a la misma latitud que Filadelfia, en los Estados Unidos, y Madrid, en España. Montañosa en el norte y el oeste y plana en el sureste, Pekín tiene una superficie total de 16.800 kilómetros cuadrados, aproximadamente el tamaño de Bélgica.

La ciudad está rodeada al oeste, norte y este por las montañas Yanshan. La pequeña llanura aluvial del río Yongding se encuentra al sureste. Pekín está frente al mar de Bohai, también llamado bahía de Pekín. La ciudad es un 39% de tierra plana y un 61% de zona montañosa. La región más alta se encuentra en la esquina occidental de Pekín y se encuentra a 2303 metros, mientras que el punto más bajo se encuentra en el extremo sur y se encuentra a 44 metros sobre el nivel del mar. Los límites de la ciudad se extienden a unos 80 km y se componen de 18 distritos y condados con una población de más de 13 millones de personas.

El territorio de Beijing está embellecido por árboles verdes y abundantes jardines bien cuidados, y plagado de antiguas mansiones imperiales, como la Ciudad Prohibida, el Palacio de Verano y otros edificios antiguos, santuarios religiosos y sorprendentes estructuras antiguas y modernas.

Ambiente

Como centro cultural y político del país, Pekín es una ciudad muy segura para los extranjeros. Siempre hay una gran cantidad de eventos en la ciudad, ya sea una reunión política importante o la última exhibición de autos. Además, el folclore de Pekín aún mantiene viva la fascinación de las peculiaridades de antaño. Un rico patrimonio cultural y artístico que cobra vida gracias al floreciente desarrollo urbano ha hecho de Pekín el lugar de ensueño para los viajeros de todo el mundo.

Alrededor del 95% de los habitantes de Beijing son chinos han, mientras que el resto de las 56 minorías étnicas oficiales de China están dispersas por la ciudad.

Economía

La economía de Pekín ha cambiado drásticamente desde 1949. Tradicionalmente, la ciudad era principalmente un centro administrativo y cultural debido a su gran distancia de la zona económica clave del país, el valle del río Yangtze. Sin embargo, en la década de 1990, el entorno comenzó a cambiar a medida que el sector privado comenzó a despegar. Los inversores extranjeros comenzaron a comprender la importancia de China como potencia económica mundial y los residentes de Pekín siguen siendo testigos de un crecimiento económico masivo, una expansión estructural y una modernización tecnológica. Los empresarios se apresuraron a abrir bares, clubes y restaurantes para dar cabida a la nueva generación de personas que se beneficiaron económicamente de esta expansión.

A medida que la economía continúa en auge tanto a nivel local como global, los negocios en Beijing son uno de los temas más candentes del mundo. Los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 han atraído a viajeros tanto extranjeros como nacionales, lo que ha dado a esta próspera ciudad una mayor exposición al mundo exterior. Junto con el hecho de que el comercio exterior y la cooperación económica global están prosperando, Beijing es un entorno empresarial único que ofrece innumerables oportunidades.